Una empresa de software especializada en recursos humanos nos solicitó la organización de diversas actividades de team building para su offsite de dos días. Estos fueron momentos claves de desconexión para el equipo de informática, brindándoles la oportunidad de recargar energías y regresar con un enfoque renovado para el desarrollo de su producto.
La empresa seleccionó un fantástico lugar para hospedar a sus empleados y empleadas, ubicado en plena naturaleza y provisto de restaurante, bar, jardín, terraza y piscina al aire libre.
Después de explorar el espacio, nos embarcamos en la creación de la actividad principal del primer día: una emocionante carrera de orientación con un raid de aventura. Ambas modalidades están impregnadas de elementos fundamentales como el trabajo en equipo, la estrategia, la adaptación al cambio, la asunción de liderazgo y la maximización de los talentos individuales en beneficio del equipo.
El raid de aventura consistió en diversas pruebas deportivas en medio de la naturaleza, distribuidas en un terreno más o menos extenso. Entre las actividades se incluyeron el tiro con arco, el bosque vertical, la tirolina, el rápel, entre otras.
Tras concluir esta emocionante y divertida actividad, los empleados disfrutaron de un almuerzo con un variado menú, seguido de una tarde libre. Cerca de la piscina, proporcionamos la música de un DJ para que pudieran relajarse, disfrutar de un baño y acompañarlo con un refrescante mojito.
Al día siguiente, por la mañana, tocaba presentar a los demás compañeros todo lo que habían estado trabajando durante tanto tiempo. Juntos, analizarían los resultados y buscarían mejoras para el producto. Una vez concluida esta fase, les teníamos preparada una actividad muy dinámica: un taller de batucada.
Con esta actividad, nuestro objetivo era que los participantes experimentaran la fuerza de la colaboración, comprendieran la importancia de cada una de las partes que integran la orquesta, valoraran la escucha y contribuyeran con su energía personal para alcanzar un objetivo común.
La combinación de desconexión, aventura y colaboración marcó el éxito de este offsite. Cada actividad diseñada con cuidado contribuyó a consolidar vínculos, fomentar la innovación y cultivar un espíritu positivo. Este evento no solo fue una pausa necesaria para recargar energías, sino también una experiencia que resonará en la memoria de los participantes, inspirando un enfoque renovado en el desarrollo de productos y el trabajo en equipo.